248) LEY DE LA ATRACCION - Jesús entra triunfal a Jerusalén (Parte 3)

Nota del autor: Este artículo debido a su extensión fue dividido en diez partes, a ser publicados uno semanalmente. A continuación la Parte 3:

 

Respecto al resumen que hice, de los versículos que tomé de:

 

La entrada triunfal en Jerusalén

 

Me quedaron hasta ahora pendientes por interpretar, los siguientes:

 

1-      se acercaban a Jerusalén, junto a Betfagé y a Betania (Marcos 11, 1)

4-  luego lo devolverá (Marcos 11, 3)

      8-  pusieron sobre ellos sus mantos (Mateo 21, 7)

     9- Y la multitud, que era muy numerosa, tendía sus mantos en el camino; y otros cortaban ramas de los árboles, y las tendían en el camino. (Mateo 21, 8) 

 

Cuando se indica (punto 8) que se pusieron “los mantos” para que Jesús se sentara, automáticamente me vino a la mente el versículo de Apocalipsis (19,13):

 

13- Viste un manto empapado de sangre y su nombre es: La Palabra de Dios.

 

En el artículo titulado “Nº 150 - Revelación de Jesucristo (Parte 4)”, interpretando el mismo, expresé en ese momento lo siguiente:

 

“El manto empapado de sangre, es la forma de denominar a la placenta del útero materno. Donde “manto” es la placenta misma y “empapado de sangre” son el entrecruzamiento de cientos de vasos sanguíneos, que contienen el oxígeno y nutrientes que alimentarán al bebé durante el embarazo.”

 

Fuente de consulta: http://espanol.pregnancy-info.net/acerca_de_las_placentas.html

 

Entonces intuyendo, que los mantos tenían algo que ver con la placenta, comencé a investigar de qué manera encajaban, las dos veces que se citaba a la palabra “mantos”. Y encontré lo siguiente:

 

“El saco amniótico es la cubierta de dos membranas que cubre al embrión. La membrana interna llamada amnios contiene el líquido amniótico y el feto en su interior. La membrana exterior, llamada corion.”

 

Fuente de consulta: https://es.wikipedia.org/wiki/Saco_amni%C3%B3tico

 

Lo que me llevó a la primera conclusión; de que las dos membranas que conforman el saco amniótico, son “los dos mantos” que se colocan sobre la asna y el pollino.

 

Mientras que al decir “la multitud tendía sus mantos y ramos en el camino al paso de Jesús”, esto simboliza a los vasos sanguíneos de la placenta (mantos) y la ramificación de los mismos (ramas).

 

Abajo les transcribo un párrafo de una página Web, que hace referencia a ello (la aclaración entre paréntesis fue colocada por mí):

 

“La placenta se comunica con el sistema cardiovascular materno por medio de numerosos (multitud) vasos de pequeño calibre que nacen en la pared uterina. El cordón umbilical contiene vasos sanguíneos que se ramifican en capilares dentro de la placenta.” 

 

Fuente de consulta: https://prezi.com/weuf0lfrsxgb/circulacion-materno-fetal/

 

Y cuando los discípulos expresan respecto al animal de carga que lo transporta: “luego lo devolverá”; con esto se está queriendo decir, que ese óvulo que inicialmente se “pegó” (anidó) en el útero, comenzará al ir desarrollándose, a separarse por medio del cordón umbilical y volviendo hacia el centro del útero; ahora ya con el feto suspendido dentro del saco amniótico.

 

Hasta aquí fui interpretando esos versículos, entendiendo lo que esas frases en negrita me transmitían a simple vista, por la experiencia que me fueron dando todos esos versículos que fui traduciendo en estos, más de seis años de investigación. Mientras que el buscar en Internet el significado o definiciones de esas mismas palabras, hizo comprobar, apoyar y complementar lo que mi intuición me decía.

 

Pero en cambio las aldeas que se citaban, que estaban cerca de Jerusalén (Betfagé y Betania); si bien sabía que éstas contenían un valor importante por ser nombradas, no podía entender con sólo verlas, a qué se referían con ellas.

 

Por ello tuve en este caso que buscar sí o sí en Google, el significado que dichas palabras tenían, más el papel histórico que desempeñaban en este relato bíblico; para poder llegar a responder mis interrogantes.

 

Primero busqué información histórica de Betania, encontrando en primera instancia lo siguiente:

 

1º) “Betania: El lugar de su reposo

 

Para entender esto, yo tengo que explicar a ustedes un poco de la geografía de Jerusalén: al este del monte de los Olivos está el Mar Muerto; al oeste está el Mar Mediterráneo. Si alguien mira hacia el oeste desde el Monte de los Olivos ve la ciudad de Jerusalén, y ve también el templo sobre el monte Moriah, porque el monte de los Olivos es más alto que el monte Moriah. Entre estos dos montes hay un valle muy profundo, el valle de Cedrón. Ahora, durante el día nuestro Señor estaba en el monte del templo; al atardecer bajaba por el valle de Cedrón y subía el Monte de los Olivos –donde estaba el huerto del Getsemaní–; luego, al bajar desde la cumbre del Monte hacia el lado oriental había una pequeña aldea, Betania

Por la Palabra de Dios vamos a darnos cuenta que cuando nuestro Señor Jesús iba a Betania, pasaba por el monte de los Olivos. Si leemos los cuatro evangelios, especialmente en la última semana antes de la crucifixión, veremos que todas las noches él salía de Jerusalén e iba a Betania. Hay algo muy interesante aquí: cuando el templo de Dios en Jerusalén se tornó en una cáscara sin contenido, en un árbol lleno de hojas, pero sin fruto, nuestro Señor iba hacia el Monte de los Olivos, porque allá en Betania hallaba su reposo.”

 

Nota al margen: El resaltado en negrita del texto (menos el título), fue colocado por mí.

 

Fuente de consulta: http://www.betaniajerusalen.com/pagina7.htm

 

Primera conclusión: Betania era el lugar de reposo de Jesús.

 

Ahora les transcribo las definiciones de otros autores:

 

2º) Betania (en arameo בית עניא, Beth anya, "casa del pobre", casa de los dátiles. Aldea en la falda oriental del Monte de los Olivos, a unos 2,5 km al este de Jerusalén, en el camino de Jerusalén a Jericó (parece ser la Ananías de Neh).

 

Fuente de consulta: https://es.wikipedia.org/wiki/Betania

 

Segunda conclusión: Betania significa la casa de los dátiles.

 

3º) Betania: Casa de Dios, casa de armonía, lazo de familia.

 

Fuente de consulta: http://nombresparabebesmujeres.blogspot.com.ar/2015/01/que-significa-betania-nombre-biblico.html

 

Tercera conclusión: Betania significa la Casa de Dios y a su vez lazo de familia.

 

4º) Betania: La etimología de Betania no es segura; podría significar "casa de los pobres" o "casa de Ananías" e incluso "casa del bote".

La Betania cerca de Jerusalén se encuentra en la parte oriental del Monte de los olivos, a la vera del camino que conducía a Jericó (Mc 11,1; Lc 19,29)

Distaba de Jerusalén 15 estadios (Jn 11,18), es decir, 2.775 m.; Eusebio (265-340 d.C.) sitúa Betania en la "cuesta del Monte de los olivos, a dos millas" de Jerusalén, o sea 2.974 m.

 

Fuente de consulta: http://www.mercaba.org/DJN/B/betania.htm

 

Cuarta conclusión: Betania significa casa del bote y además se encuentra a la vera del camino que lleva de Jerusalén a Jericó.

 

5º) Betania: ¿Cuál es el significado de «Betania»? Betania significa «casa de higos». Todos los frutos están allí, por eso es llamada «casa de higos». Pero aún más sorprendente: en griego, Betania significa «la casa de los higos no maduros». Ahora uno entiende; significa que, aunque ellos no estén maduros, no estén perfectos, si uno encuentra frutos no maduros, un día habrá una cosecha. Ellos no son perfectos, pero un día ellos serán conformados a la imagen de Cristo.

Finalmente, vamos a recordar que antes de la ascensión de nuestro Señor, él llevó a sus discípulos hasta Betania. Betania está ubicada en el Monte de los Olivos. Y nuestro Señor ascendió a los cielos desde allí.  

 

Fuente de consulta: http://www.betaniajerusalen.com/pagina7.htm

 

Quinta conclusión: Betania significa la casa de los higos no maduros.

 

Ahora reagrupo todas estas conclusiones en un solo lugar:

 

Betania

 

- El lugar de reposo de Jesús.

- La casa de los dátiles.

- La Casa de Dios.

- Lazo de familia.

- Casa del bote.

- Se encuentra a la vera del camino que lleva de Jerusalén a Jericó.

- La casa de los higos no maduros.

 

Como pueden ver, las definiciones que encontré de Betania eran muy disímiles unas de otras; sin embargo yo rescaté todas estas, porque al leerlas se relacionaban con lo que había interpretado en otros artículos y por lo tanto se complementaba con el mensaje principal de esta historia bíblica (recuerden, hasta ahora sabemos que en esta historia se habla de la fecundación e implante del óvulo).

 

Entonces, al buscar todas esas definiciones de Betania; la primera que me dio un indicio fue la que decía, “la Casa de Dios”, ya que esto me hizo acordar de Apocalipsis 8, 3:

 

3- Y vino otro Angel que se ubicó junto al altar con un incensario de oro y recibió una gran cantidad de perfumes, para ofrecerlos junto con la oración de todos los santos, sobre el altar de oro que está delante del trono.

 

En el artículo titulado “Nº 194 - El Cordero abrió el séptimo sello (La séptima plaga)”, respecto a ese versículo hice la siguiente interpretación:

 

“Entonces, sabiendo que el Trono representa al cuerpo del hombre, sobre el cual se sienta Dios (en este caso en particular simbolizando al cuerpo de la madre a punto de dar a luz), por consecuencia el altar de oro, donde se sacrificará “al cordero” el hijo de Dios (el bebé que nacerá), no es otra cosa que el útero materno.”

 

Por toda esta información que había recolectado, ya estaba intuyendo que Betania representaba al útero, y además en ese momento me acordé respecto a la definición que decía que era “la Casa del bote”, de lo que había escrito en el artículo titulado “Nº 189 - Viaje de Pablo a Roma (Parte 9)” , que a continuación se los vuelvo a colocar:

 

“Vean como el vehículo que transportaba a la carga genética se fue modificando:

 

De un barco pequeño (el hombre), se pasó a un barco más grande (la mujer); después se llamó “bote” al transporte que representaba al espermatozoide. Y ya iniciada la fecundación, con la misma palabra “bote”, se designa ahora al saco amniótico.”

 

Es decir, al ya estar seguro que Betania representaba al útero, por ser la Casa de Dios y la Casa del bote (del saco amniótico), que está llevando a Jesús y que a su vez es el lugar de reposo de él, mientras está creciendo dentro del saco amniótico. Entonces las otras definiciones se complementaban automáticamente; veamos:

 

La casa de los dátiles/higos no maduros, nos está simbolizando ese feto que todavía no está maduro para nacer. Mientras que la palabra que define a Betania, como “Lazo de familia”, si no me equivoco estaría señalando también que contiene al cordón umbilical.

 

Y por último no respecto a una de las definiciones, sino a una descripción geográfica que se hace en una de las páginas citadas que habla de Betania; “se encuentra a la vera del camino que lleva de Jerusalén a Jericó”, pude comprender dicha frase al recordar respecto a Jericó, lo que había escrito en el artículo titulado “Nº 95 - Las Pascuas y el renacer”:

 

“Comenzando por el final fue cómo fui avanzando en mi comprensión: Vemos que el llegar a Jericó, es la representación del nacimiento a nuestro entendimiento espiritual, nuestra apertura a la verdadera comunicación con Dios.

 

Es decir luego de comprender eso, vi claramente que ese recorrido en el desierto estaba representando el nacimiento y desarrollo da la vida del ser humano y que ese punto de partida del Delta del Nilo, era justamente “el nacimiento” propiamente dicho.

 

Y luego analizando ya este mapa desde otra perspectiva (recuerden que otra de mis hipótesis, es que cada versículo nos transmite con las mismas palabras tres mensajes distintos), vi que ese recorrido nos estaba trasmitiendo también “por su duración”, el tiempo de gestación de un embrión humano: 40 semanas.

 

Resumiendo:

 

La Biblia en el Antiguo Testamento, por medio del Delta del Nilo y la Península de Sinaí, nos está con el mismo lenguaje trasmitiendo:

 

1) El hombre desde el momento de nacer debe recorrer 40 años, hasta abrir la mente para lograr la conexión espiritual (el renacer espiritual).

 

2) El hombre debe recorrer 40 semanas de gestación para nacer en carne.”(la llegada a Jericó - la Tierra Prometida).

 

Hasta aquí hay dos mensajes distintos que interpreto de estos versículos y el tercero y que se relaciona con el presente artículo, es que Jericó estaría representando también el período que dura la implantación del óvulo; a tal efecto les transcribo el versículo perteneciente a Carta a los Hebreos, 11, 30:

 

30- Por la fe, cayeron los muros de Jericó, después que el pueblo, durante siete días, dio vueltas alrededor de ellos.

 

¿Aprecian cómo la caída de los muros de Jericó duró siete días?

 

Entonces, cuando geográficamente vemos que Betania está a la vera del camino de Jerusalén a Jericó; es lo mismo que decir:

 

El óvulo sigue su camino hasta Jerusalén (el cuerpo de la madre) donde iniciará el implante (Jericó) y esto sucede a la vera (al costado) del útero.

 

Y esto no es lo único que encontré en las relaciones entre Jericó y Jerusalén, también hallé otras coincidencias esclarecedoras…..

 

Nota del autor: Este artículo por su extensión continuará la próxima semana.............

 

Apocalipsis, 1,3:

 

3- Feliz el que lea estas palabras proféticas y felices quienes las escuchen y hagan caso de este mensaje, porque el tiempo está cerca.

 

A partir de ahora y de aquí en adelante la verdad de la “Palabra” empieza a develarse, el que quiera entender que entienda.

 

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Desde “la playa de las arenas argentadas”, hacia todo el mundo, Walter Daniel Genga.

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